Teniendo en cuenta lo mucho que habían bebido, no me sorprende que se les ocurriera hacer un trío. Sobre todo porque la madre es una malvada. Besar a su hija delante de su novio significaba ofrecerse como un coño para la copulación. Y el tipo aprovechó esa oferta tirándose a las dos. Incluso compartió su esperma con su madre cuando se corrió entre las piernas de su novia. ¡Maldita sea, eso es justo!
Una hermosa pareja joven disfruta del sexo con suavidad y sin prisas. Nada de acrobacias y poses abstrusas, simple y casero como era. Así es como suele ocurrir entre las parejas habituales, parece muy natural.